Letras de América

Sin duda alguna, el siglo XX fue para las letras latinoamericanas. Aquí se sembraron las semillas de la lengua que han producido frutos de enorme vitalidad para la cultura universal de nuestra época. Esa tradición ha heredado una enorme cantidad de autores en el nuevo mundo. Sí, en América, los escritores nacen como flores, claro que algunos son mejores que otros, pero todos aportan algo para colorear el horizonte literario. La mayoría de ellos, jóvenes todavía, se han distanciado de las formas clásicas y exploran nuevas corrientes para evocar el lenguaje.

Marvin Castillo nos acompaña desde Costa Rica, con poemas que confrontan la cotidianidad desde una perspectiva fresca y no carente de alta estética. A partir del lenguaje, emprende una búsqueda de sí mismo y de los otros. Por su parte Fadir Delgado, se revela como una poeta fuerte pero de ritmo sutil, que aborda lo que observa y le acontece con una inventiva que hoy en día es difícil de hallar en otros autores. La imaginación y la realidad se encuentran en un espacio de figuras bellas que emocionan. Fadir es una autora que ya trascendió las fronteras de Colombia y comienza a destacarse como una de las voces a seguir de nuestro continente. Noel Alonso Ginoris nos manda desde su isla (como a él le gusta llamar a la bella Cuba) una serie de poemas de su libro inédito Humareda, con un lenguaje que sugiere y consigue atrapar al lector desde una pluma comprometida con el acontecer social. Noel habla de su época, sin describir ni prescribir, no es panfletario sino sensible y crítico. Por su parte, la literatura joven de México se proyecta con la pluma de Mariana Estrada Gaytán, que nos ofrece una epístola (género literario que requiere de un rescate urgente), que bien podría ser un poema en prosa. Ahí encontramos el sentir del viajero, un revolverse entre los días desde la vorágine de lo habitual. Otro mexicano, Pablo Rodríguez retoma la tradición japonesa del Haiku, introducida en América por José Juan Tablada. La brevedad no implica simpleza, requiere una precisión lingüística y una emoción lograda por muy pocos. Completa esta sección un cuento del hondureño Kalton Harold Bruhl, un autor que ha conseguido numerosos premios nacionales y que forma parte de la academia de la lengua de su país. Sin duda, un autor de peso, que refleja su trayectoria con un relato perturbador, que mantiene al lector con suspenso hasta el final.

Además de estos seis autores, se suman al presente número nombres de trayectoria como el de Pedro Serrano, jóvenes como Mariana Viveros, Ángel Pérez Escorza, Didier Armas y muchos autores de nuestro continente que engalanan éste cuarto número. Así que bienvenidos, estimados lectores, a un flujo casi interminable de fantástica literatura hecha en nuestra América.

Aquí algunos poemas:

De los huesos cuelgan papeles de cometa – Fadir Delgado

Siglo XXI – Marvin Castillo

Invitación desde un alféizar de Armenia – Mariana Estrada

Haikus – Pablo Rodríguez

Poemas – Noel Alonso Ginoris

Ángeles – Kalton Harold Bruhl