Inocencia asesinada (Poemas)

Yuleisy Cruz Lezcano

Arte: Perséfone

Inocencia asesinada

Entre las bombas y los restos de cuerpos

te hiciste hombre

sin pedir permiso,

mientras el permiso gritaba «¡sálvate!»

llega al punto más alto

y salva lo salvable!

¡Oh, Alí de un país olvidado!

No llores por las piernas

que en el trayecto se doblan al suelo,

por los muertos que arrastran

cuerpos masacrados.

En Afganistán los derechos olvidados

dejan el sabor

de desierto mudo entre los labios.

Oh, pequeño Alí

¡no pierdas la esperanza

en la violencia!

Conserva tu inocencia

para sanar la herida del mundo.

Mira la libertad de los hilos de hierba,

acaricia las tiendas de campaña

de este campo de refugiados,

mira las almas de cuerpos mutilados,

sentadas sobre la tierra,

no lloran, se revelan

gritan «No» a la violencia

del hombre que usa las manos

para estrangular la vida.

Dicen que los talibanes

tienen a su vez una herida

que los conduce al horror

a la violencia, al terror,

entonan de los guerreros

la canción,

incluida en los símbolos

que abren el portón

de oscuras tinieblas,

rito de sangre que proclama

los tiempos de fatalidad

de la comprometida humanidad

de un hombre que reduce a otro hombre

a la impotencia,

matando la inocencia

en los ojos de los niños.


Innocenza uccisa

Fra le bombe e i corpi a pezzi

sei diventato uomo

senza chiedere permesso,

mentre il permesso urlava «salvati!»

Arriva in un punto alto

e salva il salvabile!

Oh, Alí di un paese dimenticato!

Non piangere per le gambe

che nella corsa si piegano a terra,

per i morti che trascinano

corpi massacrati.

In Afghanistan i diritti dimenticati

lasciano il sapore

di deserto muto fra le labbra.

Oh, piccolo Alí,

non perdere la speranza

nella violenza!

Conserva la tua innocenza

per guarire la ferita del mondo.

Guarda la libertà dei fili d’erba,

accarezza le tende

di questo campo di rifugiati,

guarda le anime dei corpi mutilati,

sedute sulla terra,

loro non piangono, si rivelano

urlano «No» alla violenza

dell’uomo che usa le mani

per strangolare la vita.

Dicono che i talebani

hanno a loro volta una ferita

che li porta all’orrore,

alla violenza, al terrore,

intonano dei guerrieri

la canzone

inclusa nei simboli

che aprono il portone

di oscure tenebre,

rito di sangue che proclama

i tempi di fatalità

della compromessa umanità

di un uomo che riduce un altro uomo

all’impotenza,

uccidendo l’innocenza

negli occhi dei bambini.


Idea de libertad

La libertad tiene en sí misma

otras libertades,

algunas saben hablar

con los demonios y con los fantasmas,

otras conocen el lenguaje

del salto al vacío.

La libertad, sin embargo, es, también,

una experiencia que canaliza

el propio sentir interior,

es poder vivir plenamente

dolor y amor.

La libertad es incesantemente

olvidada,

leve nada,

reivindicaciones que empiezan

con algunas palabras,

polvos que hacen aves de eternidad.

La libertad no admite ceguera,

es como un silencio y un ruido,

existe en los ojos

de los hombres crecidos en la luz,

en la lengua que lleva

a hacer grande la palabra.

Aun así, la libertad

se esconde en la verdad del día

y de la noche,

es un cielo pintado de banderas

y es una de las razones que tenemos

para estar aquí,

unidos en gestos y palabras

que nos hacen justicia.


Idea di libertà

La libertà ha in sé altre libertà,

alcune sanno parlare

con i demoni e con i fantasmi,

altre conoscono il linguaggio

del salto nel vuoto.

La libertà però è, anche,

una esperienza che canalizza

il proprio sentire interiore,

è potere vivere a pieno

dolore e amore.

La libertà è incessantemente

dimenticata,

lieve nulla,

rivendicazioni che incominciano

con alcune parole,

polveri che fanno uccelli di eternità.

La libertà non ammette cecità,

è come un silenzio e un rumore,

esiste negli occhi

degli uomini cresciuti alla luce,

è nella lingua che conduce

a rendere la parola grande.

La libertà però,

si nasconde nella verità del giorno

e della notte,

è un cielo colorato di bandiere

ed è una delle ragioni che abbiamo

per essere qui,

uniti in gesti e parole

che ci fanno giustizia.


Velo de odio

El mundo va de dos en dos,

dos ciegos sin voz

caminan por el tiempo de derrumbes

tumultos de esperanzas arrojados

desde un balcón de odio.

En una época de escasos esplendores

el egoísmo no es sólo un episodio

alimenta el despojo de la libertad

violentada en medio de una plaza

es la palabra que defiende una raza

porque es un poco más clara.

El egoísmo está en el grito del hombre,

se nutre improperios de una sociedad

que atesora máscaras

ojos que temen la muerte

y lanzan la noche como testigo

del método científico

 que se ha vuelto amigo

del dinero y el poder

para manipular hombres

que no pueden ver

con un velo de odio

que les cubre la cabeza.


Velo di odio

Il mondo va a due a due,

due ciechi senza voce

camminano per il tempo di frane,

disordini di speranze gettate 

da un terrazzo di odio.

In una epoca di scarsi splendori

l’egoismo non è solo un episodio

alimenta l’espropriazione della libertà

violentata in mezzo a una piazza,

è la parola che difende una razza

perché è un poco più chiara.

L’egoismo vive nell’urlo dell’uomo

nutrito da improperi di una società

che custodisce maschere,

occhi che temono la morte

e lanciano la notte come testimone

del metodo scientifico

che è divenuto amico

del denaro e il potere

per manipolare uomini

che non possono vedere

con un velo di odio

che copre a loro le teste.

Yuleisy Cruz Lezcano Nació en la isla de Cuba el 13 marzo de 1973, vive en Marzabotto (Bolonia; Italia). La poetisa emigró en Italia a la edad de 18 años, estudió en la Universidad de Bolonia y consiguió el título en “licenciatura en enfermería y obstetricia” consiguió, además, un segundo título en “Ciencias biológicas”. Trabaja en la salud pública.

En su tiempo libre ama dedicarse a la escritura de poemas, poesías, relatos, a la pintura.