Cristof

Nicolas Andres Zarama

Arte: Kevin Sanchez (Kesape)

Mientras los jóvenes ven videos
que los ponen felices
Cristof se repite
una y otra vez;
nadie se salva
ni se justifica

.

Cuando pequeño
la profesora de ética
le dijo
que los locos
veían casas
en el aire
y los esquizos
las habitaban

.

Es mentira

.

Cristof tiene
un corazón
de oro y grasa
y por eso
no culpa a los demás
ni se justifica

.

En vez,
va al casino

y apuesta su fortuna
siempre al rojo
que es el color
de la pasión

.

Cuando entra, como un vaquero sombrío, cambia sus fichas y antes de
empezar, para relajar los músculos y le mente, va al baño y se come una barra
de mantequilla entera

.

Mejor que justificarse

.

Cristof
vive en Zurich
que es la ciudad del oro
-por eso su corazón
Y su gordura-
que le pesa
a la familia

.

Una vez a Cristof le dijeron que Zúrich
lleva en venta desde hace más de 2 siglos
pero nadie
tiene la plata
para comprarla

.

Siempre defiende la ciudad
Cristof
así ellos se burlen

.

Cristof
sería un gran alcalde;

con su corazón
De oro
abrazaría a la población

.

En vez
Cristof acribilla su cuerpo
con mantequilla
humo
y x.

.

Le tiemblan las manos
A Cristof
pero no los culpa
ni se justifica

.

En vez,
mete pájaros
en petróleo,
los prende
como cigarrillos
y los libera en el horizonte alpino

.

Ahí va uno. El gran carroñero austriaco
que es el primo del cóndor
me dice apuntándole a un cuerpo de fuego
con su dedo
que tiembla.

.

Y arriba,
mientras señala una estrella lo mas de casual

nacerá algún día
una mujer
que se pondrá
boinas de colores
y cambiara la historia

.

Cristof
usa gafas de noche
y de día
porque si sus problemas
y delirios
no los comparte
sus ojos
tampoco

.

No es culpa de nadie
mientras sonríe
desde el fondo
de su inflado
corazón de oro

.

Adiós Cristof
nos vemos luego

.

Cuando se queda solo
y le entran sus delirios,
Cristof se para
de su silla de cuero
y le mete un puñetazo al aire
como un León con manos

.

Mejor golpear el aire
que culpar a los demás

.

El mejor amigo
de Cristof
es su primo
Oli
que lo ama
como nadie

.

Sus ojos
son como las máquinas de las radiografías
y por eso
desde pequeño
afirmó
que el corazón de Cristof
era de oro

.

Sigue siendo de oro,
me dice a punto de quebrarse
pero está recubierto
de una cosa blanca
horrible

.

Es grasa Oli
y lo sabes

.

Oli mira por la ventana
de su apartamento y creo que llora

Adios Oli
Nos vemos luego

.

Las campanas de Zúrich empiezan a avisar la media noche; no hay nada más
triste que esas campanas chupa sueño.

Nicolás Zarama Giedion (Bogotá, Colombia, 1995). Estudió Filología francesa e Hispana, está a punto de publicar su primera obra titulada El Sinhueso en la editorial berlinesa Buch;Buchst.