Fabián Espejel

1 de enero
las calles
no están
abandonadas
el cielo
al fondo
no es
un niño
dormido
el sol no
es una gota
de champaña
que alguien
olvidó
limpiar
son
mis pasos
la música lenta
de una
fiesta
que terminó
sin que
me diera
cuenta
Risa
estallaba una brisa de dientes frescos frondas figuras del polen salpicando el clima era un cristal desparramándose tu aliento una corriente tibia en la que los buques blandos navegan desde la costa y tus labios un campo donde puede reposar la calma rosa roce deleite es un trigal por donde el aire pasa sin besar mis pasos
Primavera
ha vuelto la mansalva púrpura esas frondas calentando otras bocas
fuimos crisálidas cerezas tantas las manos vacías con que los meses van y vienen
y el sol abriendo fuego nos apunta sabe que es cuestión de tiempo que tengamos frío
que nuestras manos se dejen de sentir
el día es una bala perdida que se atoró en las ramas
De temporada
¿qué es el afecto
cansado
sino una semilla
pudriéndose en el corazón?
el miedo de pelar toda la cáscara
de tirar
gajo por gajo
algo que maduró bajo el peso
de su pulpa
mirar aquel amor redondo
como otra afirmación
de que la vida es desprenderse
cuando no queda más
que un buen sabor
de boca

Fabián Espejel (Ciudad de México, 1995). Poeta y traductor. Estudió Letras Hispánicas en la Facultad de Filosofía y Letras, UNAM. Fue becario de la Fundación para las Letras Mexicanas en el área de Poesía (2019-2020). Ha publicado en varias revistas y suplementos mexicanos y latinoamericanos.