Sótano (Poemas)

Fátima Vélez

Arte: Irene Barajas

Sótano

que quieres quitar de ahí las telarañas
las capas de moho
inténtalo
a ver si no aparece de pronto la olla
con el arroz pegado
los guantes amarillos
que protegen
del jabón quitagrasa que te agrieta la piel
y en el silencio
de quien lava platos y olvida poner música
el poema se tararea solo
como si tuviera pies
y quisiera hacer de ti un salto
es
no cabe duda
ese que dice que se llegó al final de la carrera
y el premio es otra carrera

y si el premio es mugre coagulado en un sifón
y si todo fondo no es más que horas percudidas en la cortina de baño
la sala donde la luz pega directamente en el reflejo de la infancia
donde también el tema es con la luz

los niños
sus deseos
su canto de sirena
que tratan de arrastrarte a la inacción
a no ser otra cosa
que calor atemporal

su belleza
que crece
sobre  filo
raíz
que no se ve en ningún espejo
pero sabes
si no la cuidas
no la riegas
no la podas

recuerda

poner papel conciencia en las paredes

quien se ha cortado con papel sabe
lo que guarda en sus bordes el blanco

esa deuda adquirida para la educación en el extranjero

el pago de la deuda debe ser completo

Manual de derecho civil

este tintineo de futuro
este caminar de pato y el niño y la niña
y el límite que separa el lenguaje
del pío pío doloroso
que agria la leche
que traigo y cargo con su peso
hasta la casa
y en mi ilusión hace fuertes mis brazos

y el niño y la niña que llevo de la mano al colegio
para quienes cocino desayuno y siempre fruta sobre la mesa y la digestión de la
fruta por las tardes después de largas jornadas que los clavan en panzas de una
gran y otra deuda pero al final la misma
y la forma de intimidad que yace en nuestros genes que no es identidad
pero también lo que sea que sea la identidad

esto de aquí también soy mi deuda

y este pelo recién cortado
y ese árbol rosa conmoviendo desde el centro del otoño
y la parte inferior de la pupila
marcada con cuidado por el delineador
para que de ahí surjan ojos negros de redundancia
que haya de donde inducir un más allá, una profundidad, una idea de alma
o al menos de sujeto

algo

más que este aquí donde me ven
55.360.12 dólares que hacen de cada día un crecimiento
no espiritual
no en altura
no como decía Soraida
cuando yo era pequeña
que si estiraba y estiraba los brazos justo después de despertar, pero solamente
así,
crecería
si lograba estirar los brazos
hasta más allá de la cama
podía estar segura
crecería

ya quisiera en altura haber crecido
como la deuda crece hacia un desfile de números en rojo

roja la deuda se interna en esa carta
en la que un hombre al que una vez amé escribió:
me fui a caminar para tomar unas fotos y las vi, serpientes rojas con plateado,
entrelazadas, bañándose entre la corriente, casi se me para el corazón

mi deuda y su entrelazamiento
entre esa no panza nacen miles
no podría decir cuántos
los intereses sobre los días
que no suficientemente largos
para el volumen de la deuda

ya los intereses cuelgan de los intereses
se deslizan en rojo
del 7 al 12 por ciento
del periodo de gracia a la desgracia

invitar a la deuda a compartir intimidad
a ser alérgica a los gatos, al polen, y a cosas increíbles como las hojas de papel
blanco
invitarla
ven
cómo metería mis dedos en tu aliento
a mi tiempo haciendo cuentas, tiempo restringido de los encuentros con los
cuerpos amados, tiempo clausurado para nada que no sea cumplir con los pagos
mensuales,
cómo metería mis dedos en tu boca o mi libertad que apesta a esa manzana que
se deja y se arruga en lo más, mi libertad, o solo risas, ni una imagen, solo risas,
mi libertad o una ironía más parecida al caucho y como el caucho blancuzco y
masticable

en tu baba

nos erizamos ante ti, tú, que no eres figura a la medusa
tú, que ante ti cifras
y trazas rigidez que si opongo resistencia
quedaremos sin

casa?

si tajo  cada lomo de mi tiempo
con qué parte de mi cuerpo he de pagar
si no hay manera de pesar mi páncreas

carne y deuda apretando
hasta que el chorro brota
carne y deuda apretando
hasta vaciar sobre la pesa de cobre
el placer equivalente al peso de la deuda
el más cercano al corazón
sin derramar ni una gota de sangre

alimentar a los caballos

similus cum similibus curantur,
que quiere decir que los burritos se juntan para rascarse

las montañas de Catskill
el establo
un caballo marrón
él le dice
si fuera animal
sería un caballo

como el caballo marrón
que ella mira y dice me excita

cómo la excita
pregunta él
ella responde
como si las cosquillas quisieran reemplazarme, muy aquí, con la escasa noción
que pueden tener las cosquillas del aquí

seguramente el caballo la sepa abarcar bien
dice él
pero, advierte
si alguna vez ella se acuesta con un caballo
no volverá a tocarla

ella no está diciendo con perros
con gansos con cabras
dice con caballos
pero No es un músculo enfático
y ella comprueba cuando toca su mano
el No mayúsculo
impregnado de lomo
y dice no me acostaré con un caballo
para que siga tocándome
lo dice en serio
sabe
no existen otros caballos como él

las montañas de Catskill
se hacen las que no oyen que no saben
y rodean un lago antes un pueblo
removido del núcleo para contener
la reserva de agua de la ciudad donde él y ella
toman agua de la llave como si no estuvieran lejos
de lo que alguna vez los hizo cerca
de qué han estado cerca
no del futuro
pero existe
dónde
en el agua de la llave tal vez

si la mirada estuviera hecha para extraer lo otro
de lo uno
pero el ojo no ablanda
el cuerpo allá
marrón con la sustancia de lo vivo
su cola espanta moscas
sabe producir mirada
comer cagar ver oler una hembra
abalanzarse incrustarse
lastimar el reflexivo
solamente en comer
comiendo buscando más comida
gerundios del potrero
pero si hay una hembra
tumbar
arrasar
he ahí una palabra

he ahí una función

en contraposición las hojas
su postura de otoño
caen como si de caer hubiera adentro un canto
inspección del nosotros en la caída
el yo se instala en ella
él muta en otro
donde hay un yo y un tú hay un lugar donde crecen
y se ajustan y se enquistan las expectativas

alerta no quedar
en ese ahí de nos
qué hacer luego con esa pulsación
frente al semental jamás castrado
el espacio entre
se cubre de atmósfera
la visión declina
es ahora un asalto relinchante
y ella ya no está con una persona, ni con un caballo
está con la sensación de esa persona, de ese caballo

dirían que no se desea un objeto sino un conjunto

no me acostaré con un caballo
dice ella
pero cómo sabemos
los que pronunciamos palabras
y escuchamos promesas
los que creemos en mundos naciéndose
y otros acabándose
el mundo de las moscas, por ejemplo
el sexo con caballos, por ejemplo
de tanto desear que de ahí surja materia
no como pus
no como llaman los espíritus a lo vivo

materia como un colgar
de la firmeza de un caballo
la firmeza en que la forma encaja

formas colgantes que se parecen a aquello que las desea

¿qué se siente penetrar?
pregunta ella
debe ser, pero dígame usted
sabe más de esas cosas

debe ser apretar
que flujo se haga súbdito
materia que habla sobre cómo siente su materialidad
¿humedad? ¿barro? ¿qué?
Poder, dice él
poder sacar de un cuerpo donde el otro no es posible
el talón del amor

se podría hacer cuero de este momento
un cinturón de mirar un caballo
un cinturón marrón jala con su hondo animal
un cabalgar tal vez hacia un futuro
mejor hacia un presente
con anteojeras blindada la ansiedad de ser otro
tomados de las manos
la cabeza de ella descansa en la de él
y ella lo rascará, le dará guayabas, alfalfa
zanahorias

Fátima Vélez (Manizales,1985). Estudió literatura en la Universidad de los Andes y posee estudios de posgrado Escritura Creativa por la Universidad Nacional de Colombia y la Universidad de Nueva York (CUNY). Ha publicado el libro Casa Paterna (Universidad Externado de Colombia, 2015), y Del porno y las babosas (Deep, 2016), publicado en Brasil, en colaboración con la artista Powerpaola, entre otros. Sus poemas, cuentos y ensayos han sido publicados en diferentes blogs literarios y antologías. Asimismo, ha participado en diferentes festivales de poesía de Cali, Bogotá, Manizales y Zamora (México). Actualmente se encuentra realizando un doctorado en estudios culturales hispanoamericanos en la universidad pública de Nueva York.