Elsa Cross
El paraíso de los ahogados
(Sobre el fresco teotihuacano del Tlalocan)

En memoria de
Miguel León Portilla
Se fueron al fondo,
se perdieron
en un agua tan verde
para emerger
al fin de esa vorágine
hacia un espacio rojo—
campos de flores,
mariposas de ámbar y obsidiana.
Y aun así,
entra el poeta
lacrimoso
añorando otros prados—
sus otras flores
y sus cantos.
Allá donde latía
—aun precario—
su dolido corazón,
allá donde surgían
—aun oscuras—
aquellas formas
creciendo en torno
o marchitándose,
aquel arroyo
que aun en cauces pedregosos
o llanuras desiertas
discurría—
donde luchaban por un gramo de vida
lo mismo el chapulín
que el ahuehuete,
el aguilucho
que el faisán
o el tigrillo de monte,
que ahora
—sin aliento—
se van volviendo para él
un sueño incomprensible
—como la propia vida.
De la antología Inflexiones de la luz
(Guadalajara: Salto mortal, 2019)
***

Elsa Cross (Ciudad de México, 1946). Poeta, ensayista y traductora. Doctora en Filosofía por la Universidad Nacional Autónoma de México. Estudió Meditación y Filosofía Oriental en Ganéhspuri, India. Ha ejercido la docencia en varias instituciones de primer nivel en el país y también se ha hecho acreedora a importantes reconocimientos como el Premio Nacional de Poesía Aguascalientes 1989 y el Premio Nacional de Ciencias y Artes en Lingüística y Literatura en 2016, entre otros. Parte de su poesía se halla publicada en antologías de una docena de países y cuenta con libros que han cimbrado el horizonte literario en México, de los cuales se pueden citar, por ejemplo, Canto Malabar (FCE, 1987), El diván de Antar (Joaquín Mortiz, 1990) y Bomarzo (Era / Consejo Nacional para la Cultura y las Artes, 2009). Actualmente es profesora titular de Filosofía de la Religión en la Facultad de Filosofía y Letras.