Poemas 2014-2019

Josu Landa

Arte: Jesús Pastrana

Extinciones

Como todas las noches, hoy llovió a cántaros.

     Como todas las noches, los sapos buscaron la carretera

  para darse baños de vapor sobre el pavimento tibio.

     Como siempre, los coches pasaron por la carretera

y aplastaron montones de sapos.

     Como todos estos días, hoy amaneció la carretera

 encharcada de sapos destripados.

     Como siempre, los coches siguieron pasando y pasando por la carretera.

     Y nadie vio nada extraño en la masacre.

***

Aun en el suelo, las flores de las jacarandas dictan el vivo furor de la primavera.

***

Un simple chubasco se lleva el sol de la tarde y nos deja la tristeza

***

El otoño recorre mis venas.

***

Después del aguacero, como si se me hubiera empapado, me pesa más la soledad.

***

Racimos de gotas entre las hojas de la araucaria.

         A su tiempo, unas buscan la tierra; otras, el cielo.

          ¿Quién decide su destino?

***

Lo leo en el periódico: están desapareciendo las abejas en todo el mundo.

     ¿Seguirán después las flores?

     ¿Seguirá el poema que alberga las flores?

     Nadie podrá responder con miel.

***

Una mota de nieve se posa sobre mi frente.

Por fin, algo que se derrite por mí.

De Extinciones (2014)

Mundo Neverí
(Fragmentos)

En la raíz de cada sombra hay una piel

          una corteza

          la ruina acaso de una luz sumida en el humus

                del horizonte siempre en fuga

          la pulsación agónica

                de un fulgor en retirada

          el espejo-río con su sed de formas

          la oscuridad volátil de una huella

                 vertida en el olvido

          la traza exangüe de un dios equívoco

***

Hay una fiebre temblando en resolana

          hay un hervor de corazones ahítos

          de hundimientos:

          si acaso flotaciones efímeras

           hay un fervor de bocas y semillas:

           chispas tácitas en abandono

           en el hálito del día

           siempre sin palabras

***

Las paraulatas hacen su nido en el cují

          en medio de la enramada

          brotan plumas tiernas

          nace el canto nuevo

          pequeños corazones aprenden a latir

          pronto un vuelo nunca visto atravesará

               la claridad.

***

Mi sombra se entrevera con residuos del día

en el manglar herido

           Hay demasiado silencio en el corazón del río

           Hay una brisa parca o agua seca entre

                murciélagos y chispas de luciérnagas

            Hay un zumbido-mundo al primer borde

                 de la noche:

             la hora virgen de la oscuridad

***

habría que ver

            la matriz del río

            grávida de sol en limpidez

            el hervidero de criaturas

            entre el bagre y el caimán

            la gracia de los cumanagotos

            en el manglar y la curiara

            los grandes coros de sapos

            al son de la garúa en el atardecer

            la volatería de alas

            en celebración de la alborada

            o

            en temblor por el amago de algún trance

            los monos y las iguanas

            en poder de la umbría

            la humilde fortaleza de los juncos

en medio

de la eterna eclosión de flores inocentes

las miríadas de tortugas

y su carga de tiempo

la virtud de los tinajones

con su porción de río en tesoro

la obstinada floración de la vida

en la vida y en la muerte

habría que ver

lo que se fue con el agua

lo que quedó en el mar de la memoria

lo que vendrá con el agua

De Mundo Neverí (2019)

Josu Landa (Caracas, Venezuela, 1953). Poeta, narrador, ensayista y filósofo. Actualmente se desempeña como maestro en la Facultad de Filosofía y Letras de la UNAM. Es miembro del Sistema Nacional de Creadores de Arte. Su trabajo filosófico gira en torno al estudio de la ética tomando como punto de partida las escuelas helenísticas y la doctrina platónica. Entre sus obras más destacadas se encuentran Más allá de la palabra (UNAM, México, 1997),Poética (FCE, 2002), Viaje a Cipango (Fondo Editorial del Caribe, Venezuela, 1990), Los tankas de Arropain (Lida, Bilbao, 1991), La luz en el vano: antología poética (UNAM, México, 1996), Treno a la Mujer que se fue con el tiempo (Arlequín, Guadalajara, 1996), por el cual recibió el Premio Carlos Pellicer, y Mundo Neverí (Monosílabo, México, 2019). También es autor de la primera novela endógena del exilio vasco, Zarandona (Centro Vasco de México, 1999), y de las traducciones al euskera de Piedra de Sol y Muerte sin fin.