Miguel Orozco Rico

A la misma hora de la muerte de Cristo,
a las tres de la mañana,
cantó el violín de la victoria,
y entre los brazos del sueño y de la muerte
yací como una hoja amarga.
Después, con los brazos del légamo indeciso
pegados a los labios
y unidos al rostro
he girado la mirada hacia la derecha
y después a la izquierda
y, en medio, de nuevo la muerte:
un cerro con el rostro común de la agonía
volvió del fondo azul y verde del camino,
qué más nos dan los miles de cuervos de Poe
si las manos nos huyen en pus y vasta agua,
qué más los ladrillos nos pueden importar
si el sonido de la campana endurecida
resuena como un dulce cincel dese una pantalla
o una cabra enloquecida.
Abrimos los torrentes a granel
y vaciamos las sirenas, los cantos y los peces.
Cerramos las puertas al vicio y al Edén
para calmar las olas que colmarán las lenguas.
Y entre el abre y cierra de las palmas y las puertas
está el canto silencioso de las letras.
A la misma hora, la de la muerte de Cristo
pero en la mañana, cantó el violín de la victoria, de una sola.

Miguel Orozco Rico (Jocotepec, Jalisco, 1988) Poeta. Ha participado en varias organizaciones de difusión cultural y es autor del poemario Desde aquí la vida (El Viaje, 2018), También ha publicado artículos y poemas en diversas revistas de México y el extranjero.